l cafeeros
ll el suave marango
lll madame Cicera
Vl las plumas de los pajaritos flota sobre el viento del desierto
V El Cairo Antiguo

l cafeeros

Siempre veía los cafetos como si fueran monstruos enormes que fueran devorando mis manos siempre al final de la tarde Anabele rezaba pues otro día terminó
El rocío helado de la mañana mojaba el café rojo cerca del pequeño castillo el cajazero florecía muchas frutas cajá
Y un estadounidense y dos italianos miraban de lejos Anabele
y la preguntaban cuál es el café más docente de este lugar si el amarillo o el rojo ella como no sabía responder decía el rojo es el mejor café creo que está buscando alguno para comprar

    ll el suave marango

Anabele cantaba Luna brillante que nos libera siempre de todos los sufrimientos me gusta mucho verte todos los días brillando para mí ay en los cielos luna toda cubierta de estrellas te amo
Yo todavía quiero verte en este lago
nubes brillantes brillantes llamadas sólo para mí, como el huerto de marango suave todo bañado de rocío mi pequeño ángel del cielo está en el hermoso jardín gafanhonto mi pequeño ángel del cielo es el hermoso jardín de la luciérnaga que brilla a mí como la luna y las estrellas

lll madame Cicera

 y el sol aclaró todo el jardín y las nubes de los cielos hizo un diamante madame Cicera cantaba para ninfas y elfos sus largas poesías de amor versos viniendo del fondo del corazón que ella siempre inventaba y que Anabele siempre reescribía en sus cuadernos ella siempre imaginaba caballeros gueirros cabalgando por las grandes montañas de arenas del desierto allí había un indio llamado Jambouink que siempre protegía el bosque él vivía en un Óasis lleno de cocoteros flores y plátanos madame Cicera amaba aquel lugar imaginario inventado por ella

Vl las plumas de los pájaros

 los ángeles cantaban en los nidos
Ellos eran pájaros verdes y azules después de que la noche llegaba al final el amanecer en este bosque era casi siempre mágico en las montañas los patos cantaban
causando un gran ruido en el bosque el frío hacía las pocas rosas salvajes que había en el jardín quedar todas mojadas por el rocío más siempre al final de la tarde lo que más alegraba los animales era el calor mágico del sol él era un verdadero guerrero de los cielos solamente él para calmar todo el frío del invierno y calentar las plumas de los pajaritos con su calor él es el espejo en las nubes

V El Cairo Antiguo

 En el corazón del desierto un espejo mágico de luz brillaba él era mis versos la voz de las sirenas cantando en el mar para dejar la cabeza de los marineros en una enorme confusión y sin ninguna razón al oír el canto mágico de ellas se arrojen todos los días al mar en noches de estrellas cuando la arena del reloj de arena para caer las campanas en el barco toca y empiezan a cantar
El viento traía el canto de ellos hasta ellos
El viento llevaba las arenas del desierto lejos
Anabele cantaba para el arco iris
La luna más brillante que había nos la iluminaba hecho un ángel y la liberaba casi siempre de todos los sufrimientos hecho un ángel bueno de Dios me gusta mucho verte todos los días la luna brillando para mí ay en los cielos hecho una hermosa rosa salvaje luna toda cubierta de estrellas te amo luna toda cubierta de rocío te amo
Yo todavía quiero verte en este lago
nubes brillantes brillantes llamadas sólo para mí, como el huerto de marango suave todo bañado de rocío mi pequeño ángel del cielo está en el hermoso jardín gafanhonto mi pequeño ángel del cielo es el hermoso jardín de la luciérnaga que brilla a mí como la luna y las estrellas